Rassegna storica del Risorgimento

Italia. Spagna. Secolo XIX
anno <1997>   pagina <494>
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494 Cristóbal Rob/es Muno
los contactos entre dos razas diferentes y hasta contrapucstas, Moviendo el interés y el intercambio, seria la ciudad un elemento civilizador. Espana envió médicos y frailes. Unos y otros rompian la imagen del europeo usurerò y especulador. Daban su asistencia y ayuda a cambio de nada, porque no buscaban los franciscanos la conversión de los musulmanes, sino que en sus conventos hallaran asilo a los que necesitaban alimento y cuidado. No suscitaban el menor recelo respecto a la intención de respetar la independencia de Marruecos y la soberania del Sultan.320
Canovas, junto con Francisco Romero Robledo, Fernando Cos-Gayón, Guillermo de Osma, Juan Navarro Reverter, Joaquin Sànchez de Toca y Vicente Sanchis, presentaron una proposición. En ella se condenaba al gobierno por no haberse observado la le tra y el espiritu del Tratado de Tetuan. Esa fue la causa de los perjuicios sufridos por Marruecos y Espana, senaladamente la ùltima que ve su prestigio militar mas comprometido que nunca en el Riff.33)
La defendió Canovas el 11 de mayo. Considerò, acudiendo a razones históricas y militares, que aquel tratado fue la mejor solución a los problemas que Espana pudieta tener con Marruecos y la forma mas apta para tutelar sus intereses y derechos. Siendo imposible que pudiera conservar los territorios ganados en la guerra, teniendo a la espalda el Riff, fue un aderto renunciar a lo conquistado. A cambio, consiguió el compromiso por parte de la autoridad marroqui de asegurar la tranquilidad de la càbilas. Lo olvidó el general Margallo y quiso castigar a los que atacaron a las tropas espanolas.
Luego, la represalia militar llegó tarde. Marruecos, cumpliendo el pacto, a través de Muley-Araafa, hermano del Sultan, encarriló la situación y las tropas hubieron de reembarcarse,34) pues el momento de las hostilidades habia pasado ya. No correspondia resolver el litigio al ministro de la Guerra, sino al de Estado.35) Hubo un error estratégico y de dirección militar y politica.36)
Esa calificación asi corno la alarma que denunciaba la proposición presentada por Canovas fueron tal vez excesivas. No podria negarse que el gobierno estaba alerta para conjurar los conflictos . Se evitarla cualquier
3Z> Morct, ministro de Estado, DS/C 127 (10 de mayo de 1894) 4077-4088.
**> Proposición leida al final de la sesión, DS/C 127 (10 de mayo de 1894) 4102.
M) Esa obligación estaba recogida en los articulos 6 y 7 del Tratado de Wad-Ras. Aunque fue impucsta por la fuerza de las armas, ci Sultan era el encargado de asegurar la paz entre sus subditos y log espanolcs.
3> Canovas del Castillo, DS/C 120 (11 de mayo de 1894) 4106-4115 y 4118-4121. Rèplica del ministro de la Guerra, José Lopez Domingucz, ìb. 4115-4118. La proposición fue rechazada por 159 votos contra 59, ib. 4133-4135;
*9 Francisco Silvela se adhirìó al discurso de Canovas, ib. 4121-4125. Una guerra con el Sultàn de Marruecos era imposible, era una grandisima locura, dijo Canovas al cerrar su intervención, ib. 4128.